Tantas veces he escrito de la infidelidad, pero creo que nunca lo he hecho desde la otra cara de la moneda.
Y es que el tiempo viene y va y las infidelidades son "el pan nuestro de cada día". Todas(os) vivimos alguna vez una infidelidad; ya sea que "nos la apliquen" y nos demos cuenta(incluso aunque nos hagamos los viegos u oídos sordos) o que nosotros seamos los que "la hagamos". De alguna manera, todos(o la mayoría) hemos estado invlucrado en cosas de este tipo.
Pero ¿por qué nos sucede?, ¿es que de verdad no hay amor? o ¿es "la cosquilla" del peligro o de la emoción? o ¿qué?.
Yo creo que hay varias opciones:
1. La emoción de lo prohibido que nos resulta SIEMPRE más rico, más llamativo y con ganas de querer hacerlo. La adrenalina envuelta en todo ello lo favorece todo. Pura aventura, momentánea, nada serio, nada que lleve a la ventaja de querer "engañar" si no sólo así, aventura esporádica y ya.
2. Somos infieles por naturaleza. Quizá no llamaría infieles, si no más bien, no somos monógamos, nos cuesta trabajo. ¿Por qué creo esto?; porque a lo largo de nuestra vida de pareja, los años, las cosas vividas, etc, siempre necesitamos un "refresh", algo que nos saque de la rutina, que nos de algo más sin que ello conlleve a otra cosa, solo el hecho de salir o hacer otra cosa con alguien más, así como vas al antro o al bar...así. Definitivamente ésta es peligrosa porque entonces puede terminar involucrándonos en algo que no teníamos intención y lastimando gente que no queríamos lastimar. sin duda, muchos problemas. Por eso más vale dejar las cosas claras desde el inicio e incluso, si se tiene la apertura, por qué no?, platicarlo con tu actual pareja.
3. Definitivamente hay alguien que nos gusta y pues...ahí está la cosa...éste sin duda también puede pasar. Quién dijo que las cosas eran para siempre se equivocó. La verdad de las cosas es que algo para siempre es muy arriesgado e incluso egoísta decirlo. ¿Cómo voy a saber qué pasará mañana?, ¿Cómo puedo juzgar a mi pareja o a mí misma si pasa algo así porque pues, así sucedió?, la vida está llena de cambios y sin duda éste es uno de ellos. Aprendamos también a aceptar que NADIE es de nuestra propiedad y que nosotros TAMPOCO somos propiedad de nadie si no de nosotros mismos.
Al final del día todo tiene que cierto que ver con el estar con una persona todos el tiempo. Nada dice que todo es cuestión de revancha o de ser abusivo o inconsciente ni nada. Que los hay, eso sí, también éstas existen, pero hagamos consciencia de nuestra situación como pareja, analicemos a nosotros mismos y a nuestra pareja y en base eso ubiquémonos en donde es, sin víctimas ni victimarios, como personas comunes y corrientes. Recuerda que después de todo, SOLO TÚ sabes qué quieres, cómo lo quieres, cuándo lo quieres, dónde y a qué hora lo quieres y por supuesto... si lo quieres o no ;)
Seamos felices!