Una sonrisa

¡Qué lindo es sonreír! ¿no crees?, no hay nada mejor que una sonrisa para inciar el día, para continarlo y para finalizarlo!

Definitivamente si empiezas tu día tranquila, descansada, sin premuras, sin estrés, sin precupaciones, sin ... jajaja, a estas alturas creo que no se puede ¿verdad? , lamentablemente en esta ciudad al menos, no sé si en las demás sea realmente distinto, si tienes que levantarte con la cabeza llena de cosas; entre pendientes de la oficina, personales y demás, nuestra cerebro un vez 100% despierto inicia el día de forma bastante atareada.

Te levantas tempranísimo para llegar a tiempo al trabajo, a la escuela del niño, al gym, a donde sea que tengas que ir a primera hora en la mañana y en ese trayecto estás pensando en el desayuno, en si llevas todo lo necesario para el lugar que vas, que no se haya pasado y olvidado nada, incluso piensas qué llamada harás primero, qué dirás, como subirás las escaleras o tomarás el elevador, etc, etc, etc.

De tener todo esto en la cabeza, lo que siempre se te olvida es darte 1 min, qué digo un min, 1 seg para simplemente sonreír, verte al espejo al iniciar el día y entonces posterior a esto sí, a llenar la cabeza de cosas pero de manera ordenada, con pensamientos claros.

Y es que ¿a poco no es distinto despertar con una sonrisa?, el hecho de que te veas a tí misma en el espejo sonriendo genera ¡grandes beneficios!, te quita todas las cosas que traes en la cabeza en ese momento para sólo centrarte en tu cara sonriendo y en lo chistosa que es, o lo agradable que se ve, o simplemente te da tranquilidad para iniciar el día, tu actitud cambia.

Sugiero que hagamos eso diario... estoy segura que sí notaríamos cambios en nuestro día, probemos y después me dices como te fué, ¿te parece?

Después de esto a continuar nuestro día, ¿Qué tal cuando estamos ya montadas en el auto o en el transporte público y derrepente vemos una carita que nos sonríe...?, mmm no siempre la vemos como deberíamos... mal, mal. Estamos tan apuradas con los mil rollos en la cabeza que no nos damos la oportunidad de apreciar ese detalle. Pero ¿que pasa cuando sí lo hacemos?, en ese momento definitivamente nos cambia el día. No hay nada como recibir una sonrisa de alguien más hacia nuestra persona. Esto nos quita la cara rígida o pensativa, nos despeja la cabeza un poco y nos "inyecta pilas" para el resto del día, es más, esta sonrisa, nos contagia y provoca que también devolvamos la alegría a esa persona a través otra sonrisa y contribuyamos un poco a que este día sea un día diferente para más gente.

Y ¿si la sonrisa es de un niño o una niña?, ¡mejor aún! nada como la sonrisa inocente de un pequeño para que perdure durante todo el día en nuestro estado de ánimo.

Y mucho mejor aún si terminas tu día con una sonrisa acompañada de un delicioso besito de "buenas noches", ya sabes, de esos besitos tiernos, ya sea de tus papás, de tu pareja; esto siempre nos da la oportunidad de descansar riquísimo y de pasar una noche agradable y sobretodo de tener unos sueños lindos y de despertar al día siguiente igual de contentas que el día anterior.

Además, seguro la sonrisa ayuda a que tu cuerpo se reanime y funcione mejor, a que todas las cosas que vivas ese día, las veas desde otra perspectiva, y puedas ver aquellas cosas que no todos los días tienes tiempo de ver por dejarte llevar por la rutina diaria, a apreciar todo lo que hay a tu alrededor en cada paso que das y cada palabra que dices.

Y es que mil veces mejor iniciar con una sonrisa que con una cara de "pocos amigos" o una cara enojada o molesta o estresada, estas caras también influyen en nuestro día, lo hacen más pesado, más tedioso, más difícil de llevar y no se diga de cómo lo terminamos, cansadísimas, desgastadísimas y hasta con pesadillas o con problemas de insomnio.

Porque bien podríamos ajustar aquél dicho y decir :"un gesto dice más que mil palabras" y qué mejor que ese gesto sea una sonrisa "de oreja a oreja"!. ¡Sonríe!