¡Y cómo no festejarlo si el trabajo es uno de los alimentos más importantes para nuestra persona!.
Es lo que nos hace expresar y difundir nuestras ideas e incluso hacerlas realidad.
Nada como el sentirse útil, como hacer algo de provecho para uno mismo y para su país.
Y es que la profesión no importa, cada trabajo tiene su importancia en la sociedad, desde la persona que encontramos todas las madrugadas barriendo las avenidas de nuestra caótica y bastante peligrosa Ciudad de México hasta el ejecutivo más poderoso que a esas horas descansa como un gran magnate en su residencia. ¡Cuánta variedad!. El primero realmente "se la rifa" haciendo ese trabajo. Y es que no todo mundo podría hacerlo, de entrada no es fácil decidir tomar algo que te expone a perder tu vida en manos de un "pasado de copas" al volante que no se percate de tu existencia, mucho menos sencillo perder miedo a ser atropellado. Ni qué decir de la habilidad que seguro deben tener ya de "torear" los automóviles o camiones.
Y pensar que millones de veces despreciamos ese tipo de oficios y más aún a la gente que los ejerce...¡qué tipos! ¿no?
Todos merecemos respeto, porque todos somos parte de esta sociedad que no se mueve sola, que cada uno somos una parte importante de ella, que hacemos que gire, y de nosotros depende cómo, cuando y hacía dónde gira. Movámonos juntos a un mejor lugar.
Hagamos lo que nos gusta hacer, lo que nos hace sentir útiles. No hay nada como abrir los ojos por la mañana, despertar y saber que a pesar del mega tráfico que nos tocará camino al trabajo, realmente es gratificante llegar a trabajar. Y no por el sueldo o por las excelentes caras que vemos en la oficina, si no por el simple hecho de saber que nuestro trabajo es indispensable para alguien más, ¡que sirve!. Y defintivamente mucho mejor aún que te paguen por hacerlo no?
Porque qué difícil es despertar, y desde ese momento, refunfunear que tienes que levantarte para ir a un lugar en donde ni valoran tu esfuerzo, ni te toman en cuenta, demeritan tu trabajo, las caras no son las mejores y aparte de todo, lo que haces no te gusta!, no te satisface!.
Si es esta tu situación, sinceramente te pido que lo reflexiones... porque por algo sigues ahí...una de dos:
- o tienes bajo autoestima; esto puede ser desde el momento que entraste o definitivamente ahí te han bajado tus niveles de seguridad; ¡qué vaya que es nefasto! que se "las gasten" de esa manera para obtener determinado rendimiento en la gente.
- o realmente la cuestion monetaria es muy importante y crees que vale todo el sacrificio (¡qué vaya que es tremendo!). Yo estoy convencida que el precio que pagas por tu sumisión que al final conlleva muchos malestares físicos y mentales; es muchísimo más alto que lo que recibes quincenalmente...pero sería cuestion de que lo evaluaras para que te convencieras a tí mismo de ello.
Y es que el miedo hoy en día a no encontrar trabajo permite que mucha gente haga lo que sea con tal de conservarlo, y muchos otros también se aprovechan de ello para poder explotar al máximo a sus trabajadores sin limitación alguna.
A pesar de todo esto, la verdad es que no hay nada que te haga más feliz profesionalmente hablando, que estar en lugar en donde amas estar, haciendo lo que te gusta hacer y como te gusta hacerlo, con gente que te retroalimenta, con la que aprendes, de la que aprendes y que te aprende, aunque no todos tengan la misma suerte... los que sí disfrutémoslo!, aprovechémoslo!.
Este día del trabajo, evalúate, evalúa tu trabajo y festeja porque estás en donde debes estar, estás en el lugar correcto!
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